La educación sin duda es algo fundamental en la vida de cualquier ser humano, sin embargo, existen ciertas condiciones que hacen distinto el proceso educativo, es por eso que hablamos acerca de la inclusión educativa y social en especial de los niños autistas.
En este sentido, los niños que poseen esta enfermedad requieren de docentes que tenga conocimientos en neuropsicología y que puedan cubrir todas las necesidades especiales que conlleva un niño con Trastorno de Espectro Autista, además, desarrollar una serie de actividades que puedan permitir que él vaya al mismo ritmo que los otros niños, por esta razón es que en esta oportunidad hablaremos acerca de la escolaridad ordinaria en el Autismo.
Escolaridad en el Autismo.
Se conoce como el Trastorno de Espectro Autista perteneciente a los Trastornos del Desarrollo, el cual se manifiesta durante los primeros dos años de edad del niño extendiéndose en el resto de su vida. Se podría decir que una de las áreas más afectadas entre los mismos es la interacción social y la comunicación, así como también la regulación flexible de pensamientos y conducta.
Asimismo, un estudiante que posea Trastorno de Espectro Autista no buscara tener interacción social con sus iguales y si llega en dado caso hacerlo puede que esta forma de interactuar no sea adecuada. Es por eso, que ese tipo de situación en específico puede hacer que los niños se encuentren aislados y que reciban acoso dentro de su aula de clase.
Sin embargo, otro aspecto importante en la escolaridad de los niños con Autismo es que estos pueden interferir en la inclusión dentro del aula, ya que presentan una serie de patrones de pensamiento y movimientos de forma repetitiva, lo cual puede consistir en un balanceo, cerrar o abrir puertas, entre otras. Además, tienen cierta hiperactividad a ciertos estímulos y una dificultad para comprender el lenguaje simbólico o para lograr empatizar con los demás.
Ahora bien, el Trastorno de Espectro Autista se puede dar de forma muy heterogéneo, lo cual hace que no todas las personas manifiestan los mismos síntomas ni a nivel cognitivo o conductual, así como también no presenta el mismo grado. Es importante contar con un equipo de profesores especializados que pueda adaptar el programa escolar ordinario y que a su vez atienda cada una de las necesidades específicas y personales del estudiante, para que este pueda potenciar cada uno de sus rasgos y obtenga cierto beneficio debido a la inclusión escolar.
De igual manera, para que se pueda utilizar un proceso de aprendizaje de un niño con esta enfermedad debe tener ciertas habilidades de autonomía e interacción social, es allí donde los profesionales de la educación necesitan evaluar de una forma adecuada al estudiante, para poder ver cuál es su situación en el aula.
Además, deben respetar su ritmo y estilo de aprendizaje, puesto que cada niño con Autismo aprende de una forma distinta y así se pone en práctica ciertas adaptaciones curriculares específicas y especiales que se adaptan a cada necesidad del niño.
Factores de un niño autista en la escolarización.
Se podría decir que una de las primeras características a tomar en cuenta a la hora de decantarse por una escolarización en un centro ordinario, son las condiciones intelectuales comunicacionales, así como también el comportamiento del niño que tiene Trastorno de Espectro Autista. Se podría decir que en términos generales los principales factores que se deben tomar en cuenta son:
- Capacidad intelectual.
- Nivel de comunicación y lenguaje: Se podría decir que una integración exitosa se debe a que el niño sea capaz de poder superar las habilidades sociales, hasta que pueda llegar a un punto en el que se haga entender fácilmente y pueda tener una interactuación tanto con sus compañeros, como con los profesores.
- Alteraciones Conductuales: La presencia de autolesiones o agresiones a los demás, así como la falta de autocontrol son bastante características y estas son perjudiciales para que el niño pueda tener una integración dentro de un aula ordinaria.
- Capacidad Cognitiva y Comportamental: En este punto hacemos referencia el potencial que puede tener el niño para desarrollar su aprendizaje, esto puede depender de las distintas terapias o ayudas que recibe el niño, ya que estas van a estimular y ayudarlo a llegar a su máximo nivel de potencial.
- Nivel de Desarrollo Social: Esto sin duda es un aspecto que puede mejorar poco a poco en el ámbito escolar, sin embargo, existen algunos casos que son considerados como graves dentro del Autismo, en donde el nivel de desarrollo social se puede caracterizar al nivel de niños de 8 y 9 meses. Dados ese tipo de situaciones se podría decir que la única oportunidad real de aprendizaje del estudiante, son las condiciones de interacción que puedan tener los niños de uno a uno con los profesores especializados, toda esta situación hace que el niño no se pueda integrar en un aula ordinaria.
Cómo potenciar el aprendizaje.
Para que un niño con Autismo sea abordado correctamente dentro del aula de clase y pueda lograr una inclusión en la dinámica de clase, es fundamental que el profesor puede respetar, valorar y comprender las necesidades del escolar con Trastorno de Espectro Autista.
Aunado a lo antes expuesto, este debe implicarse en el trabajo de equipo experto y mostrarse bastante flexible dentro de su labor pedagógica, todo esto con el fin de poder cubrir cada una de las necesidades del estudiante. Dentro de las actividades y estrategias que se realizan para que el niño pueda tener una excelente adaptación, debemos destacar las siguientes:
- Se debe estructurar el entorno para que este pueda ser predecible para el estudiante y así se sienta seguro a nivel emocional. Es importante la creación de rutinas, del mismo modo diseñar una serie de pictogramas con fotos o dibujos, las cuales ayudarán al estudiante a que pueda anticiparse y comprender cualquier secuencia de acciones que pueda requerir una tarea, así como también este podrá aprender a identificar sus emociones y las de los demás.
- Usar apoyos visuales que puedan facilitar la enseñanza, así como también la incorporación de una serie de programas de comunicación y competencia social, tal como lo es el programa de comunicación total, en el cual se asocian una serie de signos a vocalizaciones.
- Retomando el punto anterior es importante resaltar que los apoyos visuales ayudan a que el niño con Autismo, pueda mejorar su comprensión hacia las situaciones sociales, así como también los impulsa a poder tener una imitación de conductas de forma adecuada.
- Las fichas de trabajo de los estudiantes con Trastorno de Espectro Autista deben incluir también lo que es una secuencia de tareas paso por paso con claridad, además incluir ciertos dibujos de apoyo.
- Por último, es importante resaltar que uno de los consejos más frecuentes es crear un círculo de amigos alrededor de los estudiantes con este trastorno, que estos puedan interactuar de forma frecuente y guiar a estos estudiantes todo esto, para fomentar una mejor interacción con sus compañeros.
Igualmente, se debe tener una escolaridad ordinaria para un estudiante con Trastorno de Espectro Autista, puede presentar un reto para el docente pero sin duda puede enriquecer socialmente, personalmente y emocionalmente al resto de los integrantes de la escuela, recordemos que saber cómo tratar a los niños con este tipo enfermedades, crear empatía es conocer mucho más acerca de este trastorno, dejar a un lado los prejuicios que se ven impuestos por la sociedad y permitirnos conocer a otro ser humano, el cual tiene una realidad distinta a nosotros, y nos puede brindar una enseñanza.